Estimados socios, colaboradores y amigos,

El 9 de mayo, tras una enfermedad aguda y severa de 6 días,  murió nuestro médico jefe, Patrice Ndille. El día anterior a enfermar habíamos hablado con él, acababa de salir de quirófano, estaba como siempre lleno de vida y de fuerza...

Con estas líneas queremos expresar nuestro agradecimiento a su entrega sin límites al Hospital de Ebomé. Desde febrero 2011 no habrá estado más de 15 días lo suficientemente lejos como para no hacer una cirugía  urgente a cualquier hora del día o de la noche. El hospital era su vida y lo demostraba cada día. Su capacidad de trabajo era titánica, hacía una cesárea a las 4h de la madrugada y luego trabajaba el resto de la jornada de 7h a 16h como si nada. Era inagotable.

Nos contó que se unió a nosotros cuando se enteró de nuestra labor con los pigmeos. Siempre decía "aquello me tocó el corazón" y decidí ir a trabajar con esa ONG extranjera que se ocupaba de mis compatriotas más desfavorecidos. Y allí estuvo, trabajando sin descanso como clínico y como cirujano. Era respetado en la zona y en el hospital. 

Miles de pacientes a los que sacó adelante y madres y niños que sobrevivieron ( incluidos 4 trillizos),  gracias a sus cesáreas, llorarán su pérdida con nosotros.