BOLETÍN | JUNIO 2024

CÓMO VIVIR EN PAZ

Venciendo la ansiedad

Por Kathleen Scataglini

Me pidieron que predique en una conferencia de mujeres acerca de la depresión, la ansiedad y los ataques de pánico. Me tomé seriamente la asignación y estudié largo y tendido para preparar mis mensajes. Escuché a profesionales, pastores y consejeros. Pronto me di cuenta que como cristianos tenemos una ventaja enorme --conocemos al Príncipe de Paz. Nuestra solución como cristianos no es la de un método, sino la de una persona—Jesucristo.

 

Isaías 9:6 "Pues nos ha nacido un niño ... será llamado: consejero maravilloso, Dios Poderoso, Padre Eterno, PRÍNCIPE DE PAZ."

 

Hay una epidemia de ansiedad y miedo en todo el mundo. Muchos están buscando consejeros y psiquiatras para hallar ayuda. El Diccionario de Idiomas de Oxford describe a la ansiedad de esta manera: "Una condición mental caracterizada por una excesiva aprehensión acerca de amenazas reales o percibidas". La mayor parte del tiempo, la preocupación es sobre algo que podría pasar en el futuro--potencial o percibido.

 

Cuando un cristiano sufre ansiedad, no se trata de un "pecado"; sin embargo, es una señal de que es tiempo de orar. El apóstol Pablo escribió esta carta desde una prisión romana:

 

Filipenses 4:6,7 (NTV) No se preocupen por nada; en cambio, oren por todo. Díganle a Dios lo que necesitan y denle gracias por todo lo que él ha hecho. Así experimentarán la paz de Dios, que supera todo lo que podemos entender. La paz de Dios cuidará su corazón y su mente mientras vivan en Cristo Jesús. 

 

Estos versículos nos afirman que la oración no es nuestra "última" línea de defensa, sino nuestra más poderosa arma. Puedo imaginar al Dios de la creación sacudiendo su cabeza cuando decimos: "He hecho todo lo que pude para deshacerme de mi ansiedad. Todo lo que me resta es orar".

 

Santiago escribió: “... no tienen lo que desean porque no se lo piden a Dios” (Santiago 4:2). Y en Hebreos 4:16 somos urgidos a acercarnos “confiadamente al trono de la gracia ... para alcanzar misericordia y hallar gracia”.  Nota que en el pasaje de Filipenses 4, la promesa es que su paz guardará nuestros CORAZONES y MENTES mientras vivimos en Cristo Jesús. Tus emociones y pensamientos serán pacíficos.

 

Quiero compartir una ilustración sobre cómo muchos cristianos manejan la preocupación: cuando estamos ansiosos, decidimos entregar nuestras preocupaciones a Dios. Así que figurativamente las escribimos y depositamos en la caja de Dios. Confiamos en Él y creemos que se encargará de nuestra situación. Esperamos diez minutos y cuando la respuesta no llega, las sacamos de la caja de Dios y la volvemos a colocar en la nuestra, volviendo la preocupación una vez más. ¿Por qué hacemos esto? Nuestra concepción de Dios no es lo suficientemente grande; nos falta confiar en Él.

Nuestro Dios nos invita en realidad a DEPOSITAR NUESTRAS PREOCUPACIONES en la caja de Dios y a creer que Él se encargará de todas las cosas. 1 Pedro 5:7 dice: "Pongan todas sus preocupaciones y ansiedades en las manos de Dios, porque él cuida de ustedes”.

 

Otro punto realmente importante es que luego de hablarnos acerca de orar, el apóstol Pablo nos enseña, en el siguiente versículo, acerca de cómo pensar: Filipenses 4:8 (NTV) "Y ahora, amados hermanos, una cosa más para terminar. Concéntrense en todo lo que es verdadero, todo lo honorable, todo lo justo, todo lo puro, todo lo bello y todo lo admirable. Piensen en cosas excelentes y dignas de alabanza".

 

¡Lleven cautivos sus pensamientos ansiosos! Depositen sus preocupaciones y ansiedades en la caja de Dios y déjenlas ahí. ¡Oren! ¡Den gracias y sean agradecidos por lo que Dios ya ha hecho! La promesa es que Su paz guardará sus corazones y mentes. Está disponible para nosotros, hoy.

Ven a orar con nosotros

Nos será de gran alegría que te unas a nuestra red online de oración y discipulado, Comunionet. Nuestros grupos se reunen diariamente durante 10 a 15 minutos para abrazar nuestro mundo con oración y compartir un tiempo de compañerismo. Planeamos continuar hasta que Jesús venga.

Encuentra un grupo

Sé un propulsor este año

Estamos determinados a obedecer la Gran Comisión de Jesús y a llevar el evangelio hasta lo último de la tierra (Hechos 1:8). Nuestros grupos de oración y el ministerio itinerante de los pastores Sergio y Kathleen Scataglini hacen esto posible. Te pedimos que consideres ser un propulsor para esta red. Tu donación nos ayuda a cumplir este mandamiento. ¡Gracias y que Dios te bendiga!

Donar
Sigamos en contacto
Seguir en Facebook
Seguir en Youtube
www.scataglini.com
info@scataglini.com

Comunionet