Hoy una anécdota profesional de Proyecta
Hoy te contamos la historia de Proyecta y de cómo nació este emprendimiento.
Durante años, cada una de nosotras fue armando su emprendimiento corrector: su pequeño repertorio de experiencias, herramientas, lecturas y recomendaciones sobre marketing, sobre cuestiones contables, sobre SEO... Prueba y error, prueba y error, prueba y error hasta que nuestros emprendimientos empezaron a moverse. ¿Fue fácil? No. ¿Nos rendimos? No.
Hasta hace poco menos de dos años, nosotras no nos conocíamos. Hasta mayo, tampoco teníamos un vínculo tan fuerte, pero Proyecta surgió de una inquietud de una (Mili) que compartió con la otra (Vir), que venía pensando en algo similar. Nos unió un pregunta, un problema para resolver y un deseo. Y, así, en mayo de este año tan raro para todos, fundamos Proyecta. Las dos notamos que había una falta: un espacio para compartir experiencias, consejos y herramientas sobre la vida profesional de quienes ofrecemos servicios editoriales. Había una cantidad de temas que no se hablaban. ¿Cómo no estábamos hablando de que tal cosa es una manera de conseguir clientes y de que tal otra herramienta nos ayuda a trabajar más rápido y más eficientemente?
Por eso, en mayo de este año nació Proyecta y, con ella, nuestro vínculo loco. Sí, es loco. Estamos las dos tan contentas con lo que viene pasando que no paramos de producir, de pensar, de mandarnos ideas a las tres de la mañana y de hacernos preguntas.
Siete meses después, acá estamos: agradecidísimas de tener una comunidad que le pone mucha energía a crecer, un espacio que es de quienes trabajamos en esta industria, una amistad que crece todos los días y muchos años por delante para seguir avanzando.
¡Gracias a todos por ser parte de este espacio profesional!