¡Hola, colega! ¡Qué alegría volver a encontrarnos! Estamos muy contentas porque la edición 1 tuvo muy buenas respuestas, elogiosos comentarios y un error de tipeo (¡digamos todo!). Este domingo queremos proponerte varios bocaditos interesantes para seguir sumando en esta charla descontracturada de fin de semana. ¿Arrancamos? ¡Adelante! |
|
|
Bocadito profesional Algunas curiosidades sobre nuestras profesiones en la industria editorial |
|
|
Nosotras somos correctoras y, si tuviésemos que hacer un top 3 de normativa más pesada para corregir, sin dudas, el uso de la raya de diálogo estaría en el podio. Y somos capaces de apostar nuestro reino por una aceituna en que quienes traducen y redactan también la pondrían en el podio. Es que encima de tener diversos escenarios de uso, una tiene que andar buscándola. Si no te aprendés el atajo, el mismo teclado no te la hace fácil. Por suerte, en este sencillo posteo, podemos ver cómo escribirla y, además, cómo utilizarla correctamente. Es un buen material para tener entre tus favoritos, ¿no les parece? Es clave que entre nuestros bocaditos podamos sumar esos temas que consultamos a cada rato. ¿Qué temáticas de sus profesiones consultan más? |
|
|
Bocadito emprendedor Recomendaciones de artículos para charlar sobre nuestras estrategias emprendedoras |
|
|
Sin vacilar sostenemos que poner valor a nuestros servicios es lo más difícil de nuestros caminos emprendedores. Por el romanticismo del amor al libro y a las letras, pesa la valoración de nuestros servicios. Hay distintas fórmulas bastante extendidas de cómo poner el precio; sin embargo, poco circula entre los profesionales de la industria editorial sobre cuándo subir nuestros precios. Y no hablamos de subir a principio de cada año laboral en función de las métricas inflacionarias, hablamos de poner en valor nuestras capacitaciones constantes, nuestra profesionalización, nuestra calidad. Con esta misma mirada, Meche García Lledó explica en esta nota la importancia de subir nuestros precios con "la panza llena". Nunca es buen momento para perder clientes, pero hay ciertos momentos en los que el riesgo es menor. ¿Cuándo suben sus precios, piensan en la calidad que ofrecen? |
|
|
Bocadito práctico Recomendaciones de herramientas o técnicas para optimizar nuestros tiempos de trabajo |
|
|
Cuando proyectamos este bocadito, una de las primeras temáticas que decidimos sumar a la picadita fue nuestro mobiliario. ¿Cómo puede ser que no nos mandemos entre colegas ofertas de sillas ergonómicas o de ejercicios para mejorar la postura luego de tantas horas sentados? Optimizar nuestro espacio de trabajo con productos ergonómicos mejora la calidad de nuestra salud y optimiza nuestros tiempos. En este interesante artículo incluso se habla de algunos productos que pueden ayudar a mejorar tu escritorio laboral. Cuando trabajamos por nuestra cuenta, es muy importante que tengamos presente el cuidado de nuestra máxima herramienta de trabajo: nuestro cuerpo. ¿Conocen todas las opciones que hay para cuidarnos?, ¿optimizaron su mobiliario con alguna de estas alternativas? |
|
|
Anecdotario de Mili y de Vir Pequeños relatos de nuestra vida profesional y de nuestro camino emprendedor |
|
|
Hoy una anécdota profesional de Vir Siguiendo con el tema del artículo de Meche García LLedó, tengo una anécdota para contar sobre mis dificultades para subir las tarifas. La primera vez que me salió un trabajo de corrección, no supe cómo ponerle un precio. Le consulté a un colega con más años de experiencia sobre qué tarifa usar. Ese fue mi primer error, no porque el precio no fuera el correcto, sino porque era un precio genérico. Esta no era una corrección común: era el texto técnico de una psicoanalista (y los que hemos transitado por esos lugares sabemos cómo se expresan los psicoanalistas). En esa oportunidad, corregí el texto contenta porque era mi primer encargo. Vinieron los siguientes textos de esta clienta y un día me di cuenta de que la tarifa era demasiado baja. Corregir esos textos me llevaba horas y horas de buscar, leer, releer… Mi error fue no decidir la tarifa de acuerdo con el trabajo que tenía que hacer: una corrección de un texto especializado. Y yo, en ese punto, era una especialista en el tema (yo también era psicoanalista). Subirle la tarifa me costó un montón, sobre todo, porque tenía que doblar el precio. Pensé mucho cómo decírselo y cómo explicarle este cambio. Cuando finalmente pude decírselo, se lo tomó muy bien. Sabía que le estaba cobrando poco. De esa situación aprendí dos cosas. La primera fue que no debemos poner precios generales que tomamos de los demás (aunque pueden ser un parámetro), sino tarifas ajustadas a los trabajos que vamos a realizar, siempre teniendo en cuenta nuestra formación e idoneidad en el tema. La segunda lección fue que, cuando hay que subir el precio, hay que subirlo y no hay manera de disfrazarlo para que caiga más simpático. Por ese motivo, más vale hacerlo temprano que tarde. Estoy segura de que a vos o a algunos de tus colegas correctores les pasa o les ha pasado algo así. ¿Qué tal si compartimos esas experiencias? Respondé este correo y contanos tu historia. |
|
|
¡Gracias por sumarte a esta picadita! Y gracias por llegar hasta acá. ¡Nos encanta compartir con vos! Esperamos que los bocaditos sean de tu agrado y que te contagien para abrir el diálogo con tus colegas y amigos profesionales de la industria editorial. Como te contamos en la edición anterior, nos interesa muchísimo saber tus gustos para los próximos encuentros. Respondenos este correo y contanos sobre vos. La idea es sumar bocaditos para todos los gustos. ¡Ah!, como son nuestras primeras ediciones, si te gusta La picadita emprendedora, nos ayuda que lo compartas en tus redes. Y, si creés que hay algo en lo que podamos mejorar, nos va a hacer muy bien leer tus sugerencias. ¡Escribinos! ¡Qué tengas buena semana, colega! Nos vemos el domingo 4 de octubre con más picadita. |
|
|
Este boletín lo escribimos Mili y Vir. Para conocernos podés visitar nuestra página. |
|
|
Recibís este boletín porque te suscribiste a nuestra lista. Si no es así o querés dejar de recibirlo, por favor, escribinos a info@proyecta.net.ar. |
|
|
|
|