Mindfulness o “atención plena” tiene sus raíces en el budismo zen, pero en los últimos años su influencia práctica se ha expandido a lo largo de toda la cultura occidental implementándose no solo como una herramienta más en la medicina, la neuropsicología y la psicoterapia sino también como una propuesta de cambio en el estilo de vida que cada uno está dispuesto a tener.
En contracorriente con un mundo cambiante y exigente, Mindfulness habilita a la persona a detener su mente, conectarse con la respiración, volver al cuerpo, disminuir las causas de stress y transitar amenazas internas y externas de la vida cotidiana de otra manera.
Su principal exponente, el biólogo molecular Jon Kabat-Zinn combina elementos de la ciencia y antiguas enseñanzas budistas de movimientos corporales suaves para crear el MBSR (Mindfulness-Based Stress Reduction) que empieza en 1979 en la Universidad de Massachusetts Medical Center.
Kabat-Zinn define al Mindfulness como “prestar atención de una manera particular, a propósito, en el momento presente y sin juzgar”. Es decir, volver a una capacidad básica natural del hombre que parece haberse olvidado, la de volver al aquí y ahora, entrenar la mente dispersa y generar nuevos circuitos de neuroplasticidad neuronal.
¿Somos capaces de volver a la naturaleza de autorregulación ante el estrés, dolor físico y/o emociones que anclan en el cuerpo? Es el interrogante que Mindfulness nos abre y se despliega cada vez con más fuerza.
Algunos tips para el registro corporal y reducir el estrés:
-Recostate sobre el piso o una colchoneta de manera tal que toda tu columna vertebral quede apoyada contra el piso.
-Sentí cada vértebra en contacto con el suelo. Relajá las manos, pies y entrecejo.
-Hacé una respiración profunda y luego sentí tu respiración normal. Como el aire entra y sale.
-Hacé un escaneo corporal empezando por la planta y dedos de los pies focalizando tu atención en cada zona de manera ordenada de pies a cabeza.
-Cada vez que exhalás, aflojá esas zonas que focalizaste más y más.
-Hacé esto cada vez que medites. Antes o después de la meditación formal. También podés aplicarlo a la noche antes de dormir.
Muy pronto vas a ver todo lo que Mindfulness tiene para darte cambiando tu vida profundamente.
¡Sólo necesitás darle una oportunidad!