Los problemas de la deglución (secuencia de movimientos que lleva el alimento o los líquidos de la boca al estómago), tienen importante repercusión funcional en niños y adultos, con diferentes trastornos de salud.
Se denomina disfagia al trastorno de la deglución. Con frecuencia se cree que este trastorno es fácilmente reversible, pero en la mayoría de los casos no es así, por lo que requiere de un tratamiento realizado por profesionales especializados. Los Fonoestomatólogos nos dedicamos al estudio, evaluación y tratamiento de los diferentes procesos de la deglución.
La disfagia puede presentarse tanto en niños como en adultos por diversas razones y condiciones médicas.
En niños que, por ejemplo, padecen alteraciones del desarrollo, prematurez, problemas neurológicos y /o genéticos que conllevan a alteraciones de la nutrición, crecimiento y maduración, es crucial estimular la deglución para favorecer la buena funcionalidad de la alimentación, la respiración y el habla.
El espacio de trabajo de estimulación de la deglución, tanto en el niño como el adulto, comienza cuando se hace inminente la aparición de disfunciones deglutorias, por ejemplo durante una internación en sala de terapia intermedia, en sala de cuidados neonatológicos o en consultorio. El objetivo fundamental es favorecer y mejorar el sistema muscular encargado de la función deglutoria.
En casos de bebés prematuros, se trabaja con los padres en la orientación y entrenamiento de la forma de alimentación más adecuada, lactancia materna, uso adecuado del chupete, estimulación oral, formas de disminuir los riesgos con los alimentos, como así también se realiza seguimiento de la alimentación y función de la sonda nasogástrica o bien si existe fisura de paladar.
En el contexto de un abordaje interdisicplinario, como es el que merecen las alteraciones de la deglución, el rol del Fonoaudiólogo es favorecer y restablecer una adecuada alimentación y nutrición, evitar aspiraciones que compliquen la respiración y favorecer el habla y el lenguaje.