Dada la inquietud de algunos propietarios de mascotas es que quisimos desarrollar este tema de común interés. Una situación ante la cual no estamos ajenos de encontrar en nuestros hogares y frente a la cual debemos tener algún tipo de conocimiento básico para llevar a cabo.
Si vemos que nuestra mascota se encuentra en un estado anormal, tales como: dificultad para respirar, vomitos, descoordinación al caminar (ataxia), entre otros signos, debemos poner atención frente a ciertos puntos:
1. Coloración de mucosas: nos referimos al color de encías o mejillas por dentro, también pude observarse bajando los parpados inferiores. Estas deben estar hidratadas (es decir brillantes) y de coloración rosada a rosado-pálido más común esta última en gatos. Otras tonalidades son anormales.
2. Pupilas: reactividad a la luz. Debemos alumbrar los ojos y evidenciar la contracción de la pupila en respuesta al estímulo de luz. La dilatación pupilar sin respuesta a la luz puede denotar situación de emergencia.
3. Pulso femoral: este se encuentra en la cara interna del muslo de tu mascota. Podrás encontrarlo de la siguiente forma: deberás con tu dedo índice y medio recorrer desde la rodilla de tu mascota hacia adentro de su pierna (cara interna del muslo) a mitad del recorrido y antes de llegar a su abdomen encontrarás un latido. Un pulso femoral fuerte es buen indicio. También puedes evaluar el pulso entre sus cojinetes.
Cuando estamos frente a una situación en que nuestra mascota se encuentra con un franco paro cardiorespiratorio o algún compromiso de sus vías aéreas existen pasos a seguir (uno tras el otro) los cuales DEBEN seguirse en estricto orden. Intenten en todo momento que las maniobras sean llevabas a cabo por una persona entendida en el tema (mínimo de conocimiento) y que conserve la calma.
PASO 1: Eliminar objetos que generen cualquier obstrucción:
Proceda a abrir el hocico de su mascota y asegúrese de que las vías respiratorias (interior de su boca, garganta), se encuentran libres de obstrucciones (objetos extraños, lengua enrollada – de ser así con esta última proceda a tirarla con la mano o pinza cuidando que no lo muerda, ideal que se realice hacia el lado de la mandíbula para evitar que su propia mascota se muerda la lengua). Elimine cualquier obstrucción.
PASO 2: Extienda la cabeza y dé varias respiraciones artificiales:
- En los casos donde su mascota sea un perro grande o mediano, cierre con sus manos la mandíbula de este y respire con su boca. Para asegurarse que la maniobra se realizó adecuadamente verá que el pecho de su mascota se elevará. Dé dos respiraciones cortas pero fuertes. Realice 2 compresiones profundas del pecho para eliminar el aire pudiendo recostarlo sobre su espalda, con los miembros hacia arriba. Repita dos veces.
- En los casos donde su mascota sea un perro chico o gatos, puede que con su boca llegue a cubrir la nariz y boca mientras respira. Dé dos respiraciones cortas de baja intensidad. Realice 2 compresiones profundas del pecho dejándolo recostado de lado.
PASO 3: Inicio de compresiones:
-Para animales medianos y grandes debemos colocar decúbito lateral derecho es decir apoyarlos sobre su costado derecho quedando libre el izquierdo para comenzar con las compresiones cardiacas. Debes entrelazar tus manos y apoyarlas sobre su pecho, la zona indicada es donde el codo de tu mascota tiene contacto con sus costillas (Ver fotos adjuntas). Perros mayores a 30 Kg.: 60 compresiones cada minuto 30 a 10 Kg. 80 a 100 compresiones.
- Para perros pequeños y gatos, la maniobra se realizará de la misma forma colocándolos decúbito lateral derecho, ejerciendo presión sólo con la palma de ambas manos en la zona de contacto del codo con las costillas. Realizar 100 compresiones por minuto.
- En aquellos casos donde las mascotas son muy pequeñas la maniobra recomendada a realizar es colocar en una mano a su mascota y realizar las compresiones cardiacas con el dedo índice y pulgar. Realizar 120 compresiones por minuto.
NOTA: NO REALICES COMPRESIONES SI TÚ MASCOTA TIENE PULSO FEMORAL. NO COLOCAR OBJETOS BLANDOS BAJO TU MASCOTA QUE IMPIDAN QUE LA COMPRESIÓN SEA INADECUADA EN SU POTENCIA.
PASO 4: Coordinar compresión/Ventilación:
- Perros grandes y medianos: La proporción de compresiones a respiraciones debe ser aproximadamente 15:2 (15 compresiones torácicas por cada dos respiraciones), la maniobra idealmente requiere la colaboración de dos personas).
- Perros pequeños y gatos: la proporción es 10:3 (10 compresiones por cada 3 respiraciones).
-REVISA CADA MINUTO EL PULSO FEMORAL DE TU MASCOTA Y LA RESPIRACIÓN DE ESTE.
-CESA LA MANIOBRA SI TU MASCOTA RESPIRA POR SI SOLA.
-CESA LA MANIOBRA DESPUÉS DE 10 MINUTOS SIN RESULTADOS.
Otra causa común de Situaciones de Urgencia en nuestras mascotas, son las intoxicaciones. Estas se denominan como la alteración de un órgano, sistema o función metabólica, producida por una sustancia nociva que entra al organismo por cualquiera de las vías posibles. La sustancia tóxica puede penetrar a través de la piel, en cuyo caso se llaman intoxicaciones externas, o ser ingeridas, inhaladas, inyectadas etc., las que se denominan intoxicaciones internas.
1. Externas:
Se producen por la absorción a través de la piel de la sustancia tóxica. La más común es la producida por los insecticidas organofosforados (tratamientos externos para controlar o eliminar ectoparásitos tales como pulgas y garrapatas) que no se han utilizado correctamente. El paciente comienza con un rasquido constante de la zona donde se aplicó el producto y eventualmente hay enrojecimiento del área afectada. En casos extremos se inicia un babeo intenso, aumenta su excitabilidad, pudiendo llegar al grado de presentar convulsiones. Es muy difícil de manejar en este estado, por lo cual el propietario debe cuidarse de no ser lastimado con las uñas y los dientes de su mascota. Otros tóxicos de contacto pueden ser hidrocarburos, solventes, pinturas, etc.
Cualquiera sea la causa, se debe proceder inmediatamente a bañar con un shampoo suave y enjuagar con abundante agua corriente. En casos extremos acudir rápidamente al centro veterinario más cercano.
B- Internas:
Existen miles de productos potencialmente tóxicos. Desafortunadamente los perros ingieren fácilmente sustancias extrañas, a diferencia de los felinos, tales como los líquidos refrigerantes por su sabor dulce, veneno de ratón y de babosas. No obstante esto, las primeras medidas a tomar son:
a) Provocar el vómito con 5 a 10 cc de agua oxigenada de 10 vol, o una cucharada de sal en la boca. Está contraindicado si el tóxico es corrosivo tales como los ácidos, hidrocarburos, etc. o si ya pasó más de una hora de la ingestión.
b) Debe llevar una muestra del veneno o todo el envase al Médico Veterinario, para que puede instaurar el tratamiento correspondiente.
c) En el caso de pérdida de conciencia proceder como para el Coma.
d) No dar leche porque puede ayudar a penetrar el tóxico al organismo.
e) Algunas de estas intoxicaciones pueden deberse a la ingestión de drogas o medicamentos que el propietario suministró por su cuenta, siendo el caso típico la aspirina, que es muy tóxica en altas dosis (por ejemplo, una aspirina para adultos humanos), los antidepresivos y relajantes musculares. Es importante que siempre informe a su Médico Veterinario de la real ingestión y no intente camuflar aquellos medicamentos a los cuales estuvo expuesto, pues pueden pasar horas vitales para salvar a tu mascota. Y recuerden: “La recomendación es no dar nunca un medicamento sin consultar al Médico Veterinario”.
Dra. Valesca Gonzalez
Director Medico
Emergencia Veterinaria