Llega el verano. Epoca de festejos, vacaciones, tiempo libre...
Muchos tomamos este momento del año para mirar y replantearnos cuánto tiempo libre disponemos habitualmente y qué hacemos con él. A muchos otros, el verano parece invitarnos a realizar la actividad física y las dietas que no hemos realizado durante el año.
Pero... ¿nos damos permiso para desconectarnos del trabajo y de las ocupaciones y disfrutarlo?
La Lic. María Laura Martínez Kuhn, terapista ocupacional en APEM, nos acerca su mirada desde Terapia Ocupacional. “El Ocio y el Tiempo libre forman parte de una de las áreas del desempeño ocupacional en la que las personas participamos. Son actividades que elegimos voluntariamente a la vez que ocurre en un momento del día que no entra en conflicto con la dedicación a ocupaciones obligatorias. Tiempo fuera de responsabilidades familiares y sociales.”
Pero ocio no es lo mismo que tiempo libre. "El ocio sucede en el tiempo libre, pero no todo el tiempo libre es ocio. El ocio es aquella actividad placentera y creativa, en el cual el disfrute y la satisfacción de necesidades personales y colectivas son su principal fundamento", afirma la Lic. Martínez Kuhn.
Entonces… cómo nos favorece el ocio?
Según la especialista, “el ocio está motivado por la diversión y la satisfacción personal, pero implica mucho más. Permite el equilibrio entre las ocupaciones de la persona, provoca mayor satisfacción y calidad de vida asi como interacción con el entorno, aprendizaje, desarrollo del bienestar físico y psicológico y exploración de la naturaleza humana espiritual, intelectual y física.”
En esta época del año, con frecuencia nos inclinamos por incorporar ejercicio físico al aire libre . Es importante llevar una vida saludable. Pero si comienzo repentinamente… ¿cómo saber si estoy haciendo lo correcto? ¿Cómo evito lesiones inesperadas e indeseadas?
La práctica de ejercicio siempre es beneficiosa para el organismo y en general para la salud. Sin embargo, en verano es importante adoptar una serie de medidas preventivas.
Al realiza algún tipo de deporte o ejercicio físico en verano es fundamental prevenir la deshidratación. Los especialistas afirman que hay que reponer líquidos constantemente, ya que con la actividad física se pierde aún más agua que en otras épocas del año a través del sudor. El agua y las bebidas isotónicas no deben faltar.
La Lic. María Emilia Montes, kinesióloga en APEM, advierte que uno de los aspectos importantes es evitar realizar deporte en verano en las horas de mayor temperatura, es decir, entre las 12:00 y las 17:00 horas. Lo más conveniente es realizarlo en las primeras horas de la mañana o al atardecer. “Es importante también escuchar al cuerpo, y no someterlo a cargas o a exigencias máximas, tanto sea para prevenir lesiones futuras o alguna afección cardiaca”, afirma la especialista y agrega "se recomienda adoptar el uso de una vestimenta adecuada, que debe ser holgada y preferentemente de algodón, ya que facilita la circulación de aire en su interior."
La Lic. Montes concluye que “la práctica de actividad física debe ser progresiva, sobretodo si venimos de transitar un año con sobrecarga de stress y sedentarismo. Comenzar con una caminata aeróbica o andar bicicleta puede ser la mejor opción para una rutina saludable. Siempre calculando tiempos cortos, y poca carga para que el cuerpo se vaya adaptando al estmulo; y de esta manera evitar lesiones por sobreuso o el aumento de factores de riesgo cardiovasculares por malos hábitos en la vida deportiva. “
Por su parte la Lic. Martínez Kuhn resume aquí algunas sugerencias para el tiempo libre.
Asegurarse que las actividades que seleccionamos:
-Generen disfrute y placer
-Nos desconecten del trabajo y las preocupaciones
-Permitan sentirnos útiles, satisfechos y relajados
-Sean un desafío
-Brinden aprendizajes gratificantes
-Sean en grupo